sábado, 12 de abril de 2014

El eco en el paraíso

Tengo los labios cortados
y tiemblo,
un nudo en la garganta
amenaza con desatar
un cúmulo de hechos desconocidos.

Pensamientos peligrosos
asaltan mi mente, todo el rato.

Como si alguien tratara de asfixiarme ,
se ciernen unas manos en torno a mi cuello,
soy yo misma, ahogándome con todo
lo que evito.

Salvándome con todo lo que no provoco.

Echo agua al cemento
y kilos y kilos de acero
se amurallan alrededor de mí,
me convierto en el todo
dentro de la nada
y el eco de mis súplicas
resuenan una y otra vez
en el paraíso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario