Un año de cualquier siglo, ojalá entraras más adentro, ojalá
no existiera este vacío, este escepticismo, este querer cambiar continuamente
la situación para no encontrar nada. La lluvia es acero, desde la ventana se
ven las rejas dentro de los espejos, ojalá no encontrara definitivamente la
salida y dejara de buscar. Las noches por primera vez son inútiles-no, lo
fueron siempre-pero no quise saberlo, no quise entender que más allá de mí no
hay nada y lo peor, que dentro de mí tampoco hay nada, hablo para no
entenderme, no quiero entenderme, no quiero que nadie me entienda, el frío
corta, pero ¿sabes? el calor también, no debería pronunciarme, busco el
silencio.
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