Siento los reflejos de tu piel pálida
en mi nuca
y pienso que a veces
está bien no matarse.
Somos demasiado trágicas
para una verdadera tragedia
pero que estoy segura de que
algún día lloverá eternamente.
Llegados a este punto
pienso que lo más sensato
sería obrar más allá del bien y del mal.
Llegados a este punto
pienso que lo más real
sería abandonar la sensatez
y sentarnos bajo la lluvia
de octubre,
de noviembre,
diciembre, enero…
Pienso que lo mejor sería
dejar de salvarnos
y vivir bajo la lluvia,
besarte cuando no me veas,
no sobrevivir eternamente,
permanecer perpetuas,
deslizándonos bajo
todo lo que ya conocemos
y aún así
no queremos materializar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario